Las cajas de cambio automáticas es algo que vino para quedarse, quizá tú todavía eres reacio a su adopción, pero esto será por aquello de que cuantos menos cambios menos problemas.
Todos los coches eléctricos y casi todos los coches híbridos funcionan unidos a cajas de cambio automáticas, es la forma de maximizar su autonomía y reducir el consumo. Y ya sabes, probablemente tu próximo coche o sea híbrido o eléctrico, porque si estás pensando en comprarte un vehículo de gasolina o diésel, creo que deberías de replanteártelo.
Quizá seas de espíritu deportivo y pienses que las carreteras son auténticos circuitos donde debes contar con una caja de cambios manual porque tú, cambias mejor que cualquier máquina. Y así puedes sacar a relucir todas las virtudes de tu coche, incluso poniendo en riesgo tanto la vida de los demás como la propia. Esa actitud no lleva a otra parte que a las sanciones, o incluso algo más allá.
Aunque a decir verdad, y sin irse a los extremos quizá no quieras perder por nada del mundo esos 20 minutos aislados, de vez en cuando, donde te enfrentas a curvas enlazadas a gran velocidad y en los que trabajas en estrecha armonía con el cambio de marchas para sacarle la quinta esencia al freno motor. A ese grupo, el de los equilibrados les llegará pronto, quizá sea con un coche eléctrico, híbrido o de hidrógeno.
Sea como sea, si no te has rendido a la transmisión automática es porque probablemente incluso no habrás probado uno de estos coches con transmisión automático un buen puñado de días. Porque si lo has hecho de forma casual en algún desplazamiento, y aunque te parezca que lo hiciste francamente bien, tu cerebro no habrá realizado todavía ese clic fundamental del paso de una transmisión manual a una automática.
En cambio si eres poseedor de un coche automático, ya no habrá paso atrás.
Pero claro, de transmisiones automáticas existen varias, vamos a ver cuál es la mejor para ti de los dos sistemas más usados en todo el mundo.
Tipos de cambios automáticos para coche
Por un lado tenemos la transmisión automática por CVT y por el otro las cajas de cambio automáticas de doble embrague.
El CVT, cuyas siglas vienen de la frase inglesa «Continuously Variable Transmission» es un variador continuo y automático de par, no existiendo complejos embragues ni engranajes mecánicos más allá del uso de una especie de poleas y una correa de transmisión. Su funcionamiento es más óptimo en motores de menos potencia que los recomendados para los cambios de doble embrague.
El cambio automático de doble embrague es un sistema por el que siempre existirán dos marchas engranadas, la actual en la que está circulando el vehículo y la superior, en el momento del cambio el coche cambiará de uno a otro embrague a gran velocidad. Este tipo de cambios es más adecuado para motores de gran potencia, hablo de más de 200 caballos.
Algunos de los cambios de doble embrague más conocidos son el DSG, el S Tronik, que montan el grupo Audi Volkswagen, el Steptronic de BMW, el PDK de Porsche y el Powershift de Ford.
¿Qué es mejor el cambio de doble embrague o el CVT?
Esto de «ser el mejor en algo» no consigue más que rara vez una respuesta absoluta, ya que tanto el prisma como el resultado no es siempre fijo e invariable. Sin andar con más vueltas te explico exactamente el porqué.
Desde el punto de vista prestacional te diré que la transmisión automática por doble embrague es mejor, y lo es porque consigue emular de una forma más perfecta a una transmisión manual, existe una mayor o más destacable entrega de par a las ruedas, sin existir tanta pérdida como en el CVT, además és menos rumoroso.
También el sistema de cambio automático de doble embrague resultará más eficaz y real si decidimos utilizar el modo «semi manual» utilizando pulsadores como palancas del tipo «up/down» o las famosas levas de volante que por ejemplo equipan algunos modelos DSG de Audi y Volskwagen.
Pero claro, todo esto si te fijas esta superioridad es a través de un prisma del pasado, un reflejo a los sistemas de cambios de antes. Y esa no es la única forma de hacer las cosas, por ejemplo un scooter es innegable que es super práctico y capaz. Vale que pensarás que eso es porque no permiten salir de la ciudad debido a su escasa potencia. Mentira, existen maxi scooters de alta potencia, como las Yamaha T-Max y las AK550 motos que te catapultan a más de 170 Km/h y no tiene sistemas de doble embrague, salvo alguna excepción de Honda, como la excelente X-ADV, pero que ninguna de ellas dejan de ser deportivas.
Así que si nos vamos a un prisma de puro uso, intentando ser utilitarios y yendo hacia puntos de vista, como el de la comodidad, el cambio automático CVT es mejor.
El cambio automático CVT es mucho más suave y progresivo, de alguna forma convierte al vehículo en una especie de alfombra voladora. Es habitual en los coches de procedencia japonesa, como los Toyota y Lexus.
Por si esto fuese poco también tenemos las diferencias relativas en cuanto a su mantenimiento, la frecuencia de reparación, el peso de un sistema y otro.
La durabilidad puede depender de muchos factores, pero el cambio CVT dura casi el doble que un embrague.
Total que colocando todos los elementos en una báscula, y teniendo en cuenta la economía, si me formulan la pregunta:
¿Qué es mejor la transmisión automática por doble embrague o la CVT?
Mi respuesta será siempre la misma, el cambio mediante CVT es para mi el ganador de esta pequeña comparativa.
¿Cómo funciona un cambio CVT?
La caja de cambios automática mediante CVT no cuenta con engranajes, son dos poleas de ancho variable que se encuentran conectadas por una correa, la primera polea se conecta a la salida del motor mientras que la segunda está conectada a las ruedas.
La diferencia de ancho de esta correa hará que la potencia que llegue a las ruedas varíe. Al ponerse en marcha el vehículo necesita mayor fuerza o par motor, mientras que una vez lanzado los pequeños incrementos de fuerza hacen que se desarrolle una mayor velocidad sin precisar de tanto empuje o par.
¿Cuánto dura una transmisión CVT?
Dependerá del modelo del vehículo, las prestaciones de ese motor concreto y sobre todo de la conducción y el trato que le demos al coche. No obstante existe un valor medio en cuanto a la vida útil del sistema de cambio automático CVT que podríamos establecer entorno a los 200.000 Km.
Esto es prácticamente el doble de la vida media de un embrague, además que en los cambios automáticos de doble embrague, tenemos dos embragues con lo que el coste de la reparación se dispara en relación al CVT.