El juego presenta ideas un tanto contradictorias sobre la moralidad y la capacidad de opción, un tema común en muchos juegos.
La nueva y esperada entrega de la saga Senua siempre nos deja claro que el jugador o personaje principal del juego quien siempre tiene la elección y que el dolor no es excusa para su crueldad.
Sin embargo, a veces se puede quedar un poco corto en su objetivo, posiblemente debido a los diálogos, la narración e incluso a las propias voces de Senua, que no alcanzan el mismo nivel de poesía o introspección que en la primera entrega juego.
Narrativa del juego Hellblade 2
La mayoría de los medios, incluidos nosotros nos mostramos algo críticos con la narrativa, algo que debería ser lo esencial en esta saga, muy por encima de las alabanzas en las que sí coincidimos con el diseño visual y sonoro del juego
Muchos de los momentos de la historia son predecibles, repetitivos y carecen de intimidad.
La narración resulta demasiado obtusa, con largos pasajes de diálogo para transmitir mensajes sencillos.
No es de extrañar que durante el juego, los diálogos de los personajes secundarios pueden resultar confusos y francamente tediosos.
Jugabilidad de Senua’s Saga Hellblade 2
Otro de los aspectos muy mejorables de esta última entrega de la saga es que de forma increíble la jugabilidad es muchas veces frustrante, con demasiadas repeticiones en el combate y la resolución de puzles.
Los combates parecen excesivamente guionizados y cinematográficos, cosa que al final se traduce en que los mismos carecen de interés.
Los puzles son simplistas y no suponen un reto para el jugador.
Al centrarse en las cinemáticas, el juego carece de interacciones significativas con los enemigos o el entorno.
Imágenes y sonido
Como no podía ser de otra manera en pleno 2024 el diseño visual y de audio del juego son increíbles. Los gráficos son impresionantes, con iluminación, encuadres y modelos de personajes realistas. El diseño de sonido también es digno de mención, con audio binaural, sonidos realistas y música intensa.
En general, Hellblade 2: Senua’s Saga no alcanza el mismo nivel que su predecesor debido a que se centra más en las propias cinemáticas del título que en la jugabilidad.
Esto no quita que las imágenes y el sonido del juego sean impresionantes, pero la narrativa y la jugabilidad se quedan algo cortas.
En cuanto a la variedad gráfica, peca quizá con demasiada repetición de escenarios y monstruos.
¿Tienes qué jugar Senua’s Saga: Hellblade 2?
Sinceramente, sólo si eres conocedor y amante de la saga, de lo contrario te encontrarás ante un juego que no siendo malo es un notable bajo, nada épico, nada impresionante.
Hay otros excelentes juegos por los que si que merece la pena pasar por caja y dedicarle un buen puñado de horas, por Senua’s Saga: Hellblade 2 quizá no.