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Prueba auriculares Razer Kraken X

Prueba auriculares Razer Kraken X

Buscando el setup perfecto para un equipo de gaming una de las piezas más importante de nuestro equipazo y que deberemos valorar con mayor cuidado son los auriculares de gaming.

Prueba auriculares Razer Kraken X

En esta entrada os analizo los auriculares de gama de entrada de Razer, Razer no fabrica auriculares más económicos que los Kraken X en el momento de este análisis.

Los Kraken X de Razer son unos auriculares de gaming de gama media, cuestan alrededor de los 40 euros en oferta y hasta los 60 euros sin ella.

A destacar, sus altavoces de 50mm de membrana fabricados con neodimio.

Desde luego y a riesgo de estropearte el análisis ya te avanzo que sólo merecen la pena en su precio de oferta.

Por qué son auriculares gaming?

El apelativo gaming, los diferencia de otros auriculares que no son puramente gaming en diversos aspectos.

Por un lado la ecualización del sonido que tiende siempre a reforzar las frecuencias graves más que lo deseado para un audiofilo. Aunque esto es un punto a su favor, pues los Kraken X no son auriculares para escuchar música, si no para jugar.

El apelativo del producto como capacidad surround 7.1 para conseguir un posicionamiento mejor en la escena del videojuego, es decir para que los sonidos provengan de diferentes puntos, concretamente de hasta 7 puntos diferentes incluyendo los sonidos que provienen de detrás del jugador, los traseros.

Luego ya desde un plano físico, su intento de cubrir toda la oreja, de que la introduzcas por completo dentro de sus dos cavidades acolchadas. Con lo que más o menos conseguirás aislarte de otros sonidos externos, y así centrarte en el juego.

Otro detalle que los delatan como gaming es la presencia de un micrófono, para poder comunicarte con otros jugadores mientras juegas.

Una vez en mano saltará a la vista su contenido peso, en este caso de tan sólo 250 gramos, ideal para llevarlos en la cabeza durante largas sesiones de juego.

El cable que deberemos conectar al PC es de 1,3 m de largo, aunque en la caja tenemos una extensión que añade un metro más para llegar a un total de 2,3 m. Lo que permite alejarnos de la pantalla sin peligro a tirar nada por ener un cable corto.

Calidad de audio de los Kraken X

La frecuencia que son capaces de reproducir los auriculares Kraken X es de 12Hz a 28Khz, lo que nos da un gran espectro de frecuencias, al menos sobre el papel técnico. Luego parece que no llega a ninguno de ambos extremos.

En una prueba real los notamos como excesivamente coloreados, tienen un potente bajo, más aún teniendo en cuenta que sus drivers son de 40 y no de 50 mm, tan potentes que llegan a ahogar la voz durante la reproducción de música o las partes habladas de un juego.

Este exceso de ecualización hace que le bajemos ostensiblemente la nota en esta parte referente a la calidad sonora. En cambio para juegos este coloreamiento extremo de las frecuencias bajas no hará más que conseguir momentos más espectaculares en juegos de acción.

Por el mismo lado cabe destacar que apenas distorsionan con grandes bajos y que tienen un volumen considerablemente alto, bastante más que la media de auriculares gaming.

Compatibilidad de los auriculares Kraken X

La compatibilidad de los Kraken X es casi total, ya que la conexión es la estándard de 3,5mm es decir que podremos utilizarlos en el modo estéreo tanto en Windows, como con Mac, PS4 y PS5, Switch y Xbox, además de con el móvil.

Claro que este «casi total» tiene su importancia, y es que el software de Kraken sólo funciona con Windows. Se trata de un soft que deberemos descargar de su web y aplicar un código que viene en una tarjeta con un rasca rasca y que nos tratará de virtualizar un entorno 7.1 sin demasiado éxito.

Si pretendes comprar estos Kraken para utilizarlos con Mac o Linux casi que nos olvidamos de ellos como opción. A ver si así Razer espabila y ofrece drivers para todos los sistemas.

Lo que no nos gusta de los Razer Kraken X

Rueda de volumen y botón de mute de los Kraken

La calidad de audio, comparados in situ con lka misma música y los mismos juegos contra unos Motorola Escape Pulse que cuentan con unos altavoces de 40mm, del mismo tamaño que los Kraken, el sonido de los Razer no es tan bueno.

El sonido 7.1 virtual que consiguen, no nos ha gustado. Yo no he sido capaz de apreciar sonidos más allá del canal izquierdo y el derecho, además del central cuando la potencia es la misma para ambos.

El tipo de sonido que consigues con el software de emulación virtual 7.1 es un tipo de sonido posicional frontal, muy parecido al que consigues con un sistema estéreo normal.

La diferencia estriba únicamente en la ecualización que llevan de serie estos Kraken X sumada al software, que no es otra que un realce de las frecuencias graves.

El software de emulación 7.1 no está disponible para sistemas operativos macOS o Linux, sólo para Windows, lo que resultará una pega para aquellos que utilicen Mac o Linux.

El micrófono no lo podremos quitar ya que va anclado directamente al chasis sin conector extraíble. Esto que a priori no puede parecer necesario para mi me resulta imprescindible, sobre todo para pasarme las campañas de los videojuegos, ya que reduzco ese peso en las muchas horas que me paso jugando «solo» sin la necesidad de hablar con compañeros del equipo.

La calidad al tacto de los materiales de los Kraken X, no es la mejor, son totalmente plásticos en exceso y se echa en falta en su diseño, alguna nota de color.

La ausencia de RGB, está claro que son gama media, pero por ese precio en el mercado tienes otras opciones con mejor sonido y algo de iluminación RGB.

Pagas la marca Razer.

Lo que nos gusta de los Razer Kraken X

Caja de los auriculares

Su ligereza, que tachan de ultra light pero que una vez puestos resulta poco menos que increíble con sus escasos 250 gramos de peso.

Las almohadillas de viscoelástica, que junto con su gran ligereza los convierten en uno de los auriculares más cómodos que hemos probado.

La almohadilla superior de la diadema, su tacto y su acolchado.

La calidad del sistema de ajuste de cabeza de la diadema, que cuenta con ocho puntos de regulación y se observa bien construido.

La presencia de una rueda de volumen directamente en el auricular, así como la de un discreto botón para mutear el micrófono.

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