El sueldo bruto y el sueldo neto son dos conceptos que todos conocemos pero que de alguna manera no sabemos calcular, así que vamos a dar un buen repaso a ambos y aprender a calcular la diferencia entre ambos.
Índice de este artículo
En otros artículos de tiroriro.com te hablamos de cuánto cobran famosos, como por ejemplo cuánto cobran en masterchef, o cuánto cobra wyoming, o incluso te contamos lo que cobran los pilotos de f1, pero realmente lo que nos debería importar a todos es cuánto cobra uno mismo, conocer el sueldo bruto y el sueldo neto así como el funcionamiento de los salarios.
Así que antes de lanzarnos a conocer las diferencias entre sueldo neto y sueldo bruto definamos lo que es en sí un sueldo, para pasar posteriormente a los tipos de sueldo, y hablar también de las pagas y de las retenciones y declaración de renta.
¿Qué es el sueldo?
Según la R.A.E. acrónimo de la Real Academia de la lengua Española, el sueldo es la remuneración regular asignada por el desempeño de un cargo o servicio profesional.
Es decir, que es regular, de alguna forma está regulada en sus formas, podríamos decir que la misma es periódica y más o menos idéntica entre los diferentes periodos.
Se cobra un sueldo en base a un desempeño, es decir la prestación de algo como servicio, generalmente dicho servicio se presta a otros y no uno mismo.
Este sueldo además deberá estar regulado por el país donde se cobra, pudiendo el mismo hacer diferentes retenciones para el pago de servicios comunes al resto de habitantes de dicho país.
Estas retenciones son impuestos directos y retenciones a cuenta, tales como la retención por desempleo, la retención por la seguridad social o el impuesto a las personas físicas o IRPF.
Por tanto tenemos un primer sueldo o número, que llamaremos sueldo bruto al que le quitaremos unas cantidades variables para obtener el sueldo neto.
¿Qué es el sueldo bruto?

El sueldo bruto es la cantidad total de dinero que percibiríamos bajo el improbable caso de no existir impuestos ni retenciones que resten sobre esa cantidad.
La cantidad expresada en el sueldo bruto puede ser en diferentes monedas, euros, dólares u otra moneda, en el caso de no especificarse, el sueldo siempre será en la moneda oficial del país donde se encuentra el puesto de trabajo anunciado.
A su vez, el sueldo bruto suele especificarse de forma anualizada, es decir, una cifra que refleja la cantidad bruta del sueldo, sin tener en cuenta si el mismo se va a dividir en 12, 13, 14, 15 pagas o más.
El sueldo bruto será siempre una base, que puede o no incrementarse atendiendo a la existencia o no de incentivos salariales, como pueden ser comisiones, participaciones u otro.
Si bien este sueldo bruto es una cantidad de dinero que nunca llegaremos a cobrar realmente, ya que te recuerdo que hay que descontarle retenciones e impuestos, el sueldo bruto es el tipo de sueldo que más se utiliza en entornos profesionales para orientarte de la cantidad que te van a pagar anualmente.
Es decir, que muchas ofertas de empleo reflejan el sueldo bruto en lugar del sueldo neto a percibir, esto es porque la empresa realmente va a desembolsar el sueldo bruto como nómina, y luego será el estado el que de alguna forma se quedará parte de ese sueldo bruto. Esta parte será variable atendiendo a las condiciones del trabajador, si este está casado, si tiene hijos, hipoteca, etc.
¿Qué es el sueldo neto?
El sueldo neto es la cantidad de dinero resultante tras haber quitado las retenciones e impuestos al sueldo bruto, será siempre una cantidad inferior al sueldo bruto.
La cantidad o porcentaje qué hay que restar a nuestro sueldo bruto para obtener el sueldo neto y en que porcentaje o cantidad dependerá de diferentes factores y características del trabajador.
Es decir, que los impuestos y retenciones a cuenta nunca serán los mismos en dos trabajadores diferentes, a menos que estos tengan unas condiciones de vida exactas.
Por ejemplo, si uno vive en casa de sus padres, tendrá una mayor retención, al igual que si uno no tiene hijos, o si tienes personas mayores de 65 años a su cargo, o está pagando una hipoteca o una reforma, de alguna forma el estado pretende que el que menos gastos tiene pague más.
Si bien, como en todo existen cifras de media que te pueden ayudar a orientarte de una forma un tanto aproximada para conocer el sueldo neto partiendo de un sueldo bruto anual.
Así que te contaré que si tu salario es bajo deberás restarle el 10% a tu sueldo bruto anual para saber lo que vas a cobrar como sueldo neto, y si por el contrario tienes la suerte de cobrar un gran salario deberás restarle un 40%.
Este 10& a 40% son de alguna forma el rango que deberás restar de forma porcentual atendiendo a si la cifra de sueldo bruto es baja o alta.
Si no sabes como hacerlo, en el caso de que debas restar el 10%, divide el sueldo bruto entre 1,10, por ejemplo si tu sueldo bruto es de 16.000 euros anuales, tu sueldo neto será de 14.545 euros netos anuales.
En el caso de ser el 40% deberás dividir entre 1,40 o sin ir a extremos, por ejemplo tienes un sueldo medio, pues calcula sobre el 20%, dividiéndolo entre 1,20.
El sueldo neto, es un sueldo que además suele expresarse en una cantidad de pagas mensuales, a diferencia del sueldo bruto que casi siempre se expresa en anualidades aunque al final realmente se paguen ambos en mensualidades.
Es decir que el sueldo neto se suele expresar por ejemplo así: 1.500,00 euros netos mensuales por 14 pagas anuales
El número de pagas anuales de sueldo neto que se perciben dependerá de la voluntad del empleador, de la empresa, siendo cada día más habitual que sean 12 que no 15, pero quizá esto lo dejamos para el párrafo sobre el número de pagas.
El sueldo neto casi nunca es 100% real
Lo que hay que tener presente es que todas estas cifras de sueldo bruto no son reales, si bien nos queda a todos claros de que al sueldo bruto hay que restarle impuesto, no nos queda del todo claro que el sueldo neto que percibimos en nuestra nómina es un sueldo aproximado, que será posteriormente reajustado al año siguiente con la declaración de renta.
Sí, aunque durante un año percibamos en metálico dicho sueldo neto, este casi nunca será real al 100%, ya que las retenciones que nos realizan en la nómina son orientativas, y estas pueden y van a variar conforme avance el año, pues vamos sumando capital y podemos entre otras cosas rebasar unos límites que nos pueden hacer pagar más.
A su vez también podemos percibir dinero de otras fuentes, sean inversiones en bolsa, en fondos de inversión, depósitos, regalos de las entidades financieras, aunque sean estos en especias como «Te regalamos un TV si nos domicilias la nómina» así como gastos, reforma de una vivienda, alquileres, etc.
Todos estos conceptos harán variar la retención pero esta no se produce durante el mismo año, no se reajusta, y ese deja para el año siguiente en la declaración de renta.
Por ello el sueldo neto es fruto de un cálculo impreciso sobre lo que realmente nos toca cobrar en neto, total, así que cuando al año siguiente hagamos la denominada declaración de la renta, el IRPF podría pasar que si por ejemplo nos han retenido un tanto por ciento bajo durante el año anterior, tendremos que compensar pagando en la declaración de renta lo que no hemos pagado antes. Una cifra que a veces puede asustar.
Por ejemplo, si ese pago por la renta es de 320 euros, al sueldo neto del año anterior deberíamos restarle esos 320 euros para saber lo que realmente nos han pagado. Total, que los empresarios conocedores de esto lo pueden utilizar como truco, reteniéndote poco para que tengas la ilusión de que cobras más de lo que realmente te pagan.
Así que si año tras año te toca pagar en la declaración de la renta, exige a tus jefes que te retengan más en la nómina.
Si quieres saber más sobre la declaración de renta léete los artículos que hemos escrito sobre ella.
¿Cuántas pagas son normales 12 o más?
El número de pagas que uno recibe cada año es un hecho tan vital como irrelevante, vital a que será esa cifra la que nos permitirá calcular cuánto nos va a quedar tras pagar los gastos fijos como el de la casa en la que vives, lo suministros de energía, las comunicaciones y la comida.
Si bien también es irrelevante en cuanto a que a la hora de negociar nuestro sueldo con nuestro empleador deberemos hacer más caso al sueldo bruto anual que al número de pagas, ya que ese sueldo bruto anual será el que realmente indicará la mayor o menor cantidad de dinero que ganaremos.
Dicho de otra manera, tanto las pagas como el sueldo neto son números resultantes del sueldo bruto, por lo tanto nos interesa incrementar el sueldo bruto, el resto ya se regulará en base a él.
Volviendo a lo vital, a nuestro día a día, realmente desde una visión anual, y de alguna forma podríamos pensar que tanto da cobrar 12 que 13 que 15 pagas y que lo que nos debería importar es el sueldo bruto anual por encima de todo.
Esto es así irremediablemente, pero claro eso es en la teoría, pues en la práctica de nada o más bien de poco nos servirá saber que cobramos 25.000 euros brutos anuales cuando realmente nos llegarán 18.000 euros a nuestra cuenta.
Incluso ni eso, pues llegar, lo que se dice llegar lo harán en pequeñas dosis de 1.500 euros cada mes, cantidades que si las sumas mes a mes al final te darán esos 18.000 euros de sueldo neto anual, pero que para cuando vayas a sumarlas a buen seguro no te quedará ni de lejos esa suma, los gastos los hacemos día a día, o a lo sumo, con los grandes gastos, como el alquiler, la hipoteca, internet, agua, gas, los hacemos mes a mes.
Quizá por este motivo, al final el que más nos importa a los trabajadores es lo que cobramos neto al mes, seguido del número de veces que cobramos esa cantidad al año, lo que se conoce como nóminas, o pagas.
Si bien el año tiene 12 meses y las pagas deberían ser 12, es una tradición, cada vez menos usada, la de dividir el sueldo bruto anual en 14 o 15 pagas, con las típicas paga de navidad y paga de vacaciones, a la que se debe sumar la paga de beneficios en algunos casos.
Estas pagas especiales a muchas personas les hace especial ilusión recibirlas ya que de alguna forma piensan en utilizarlas para los regalos de navidad, para las vacaciones o para darse algún capricho. La ilusión está ahí, pero créeme que es de mejor ahorrador pensar en 12 pagas que en 15.