Una miniserie española de Netflix compuesta por 8 capítulos que fue estrenada el pasado 8 de septiembrey que de nuevo llega a lo más alto de lo más visto, al menos en España, y esta vez no es por un guion surgido de la increíble mente de algún guionista del género sci-fi o fantástico, ni tan siquiera sustenta una portentosa dirección o producción artistítica, estos no son ninguno de sus motivos para el éxito.
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Aquí prevalece la historia por encima de todo, por su cercanía en el tiempo y el espacio.
Unas llamas muy reales
La serie El Cuerpo en Llamas toma como referencia unos hechos policiales reales sobre un homicidio donde la víctima es quemada.
Estos hechos son bastante recientes, acaecidos en mayor de 2017 en el pantano de Foix, ubicado en la provincia Tarragona. La elección de localizaciones ha sido escasa, cerrada, un chalet, algunas calles del casco viejo de Barcelona y poca cosa más.
El éxito conseguido por esta serie recae principalmente en lo morboso de la historia y el magnetismo, a ratos manipulación a ratos simplemente malignos de los protagonistas principales del caso en la vida real.
El suceso se siente como algo cercano, aunque no por ello algo del creíble, y en el fondo sabes que es cierto, los noticiarios de aquellas fechas así nos los repitieron hasta la saciedad.
En la serie resaltan, a modo de representación. algunas de las interioridades de los cuerpos de seguridad que nos deben proteger a los ciudadanos, pero que se nos representan de una forma descaradamente negativa donde testosterona, abuso, orgullo e insufles de superioridad hacen mella en la vertiente de ayuda social.
El caso sobre el que gira es llamado local y públicamente como el «Crimen de la Guardia Urbana», un título que es cambiado en la serie, probablemente para conseguir un mayor impacto geográfico global, en otros lugares donde Netflix es también la primera opción para ver series.
Este tipo de cuerpo policial difiere en nombre y órganos incluso dentro de la misma España, comúnmente es denominado como Policía Local, Agentes de Tráfico o incluso la propia Guardia Civil asume dichos roles en muchas poblaciones españolas. Este es el motivo por el que sospechamos que se ha traducido por un más acertado, doblemente, El cuerpo en llamas.
¿De qué va la serie El cuerpo en llamas?
Ojo con los espóileres, aunque por tratarse de una serie que reproduce unos hechos relativamente recientes y cercanos, todos sabemos en mayor medida cómo acaba la serie y quiénes son los asesinos, así que no creo que descubre nada nuevo en los siguientes párrafos, pero si desconoces los hechos o los tienes borrosos, salta los dos siguientes titulares para evitar recibir un espóiler.
Se trata de una serie del género «true crime», ya que en ella se narra la historia sobre el asesinato real de un policía de la Guardia Urbana de Barcelona llevado a cabo por dos compañeros del cuerpo, pertenecientes a un trío amoroso formado por cuatro personas, ella, la protagonista absoluta de la serie Rosa Peral, además de su exmarido Javi, su novio Pedro, el quien es asesinado entre ella y su amante, Alber.
La serie combina una realidad aplastante con algo de ficción y drama llevado a más, aunque en el fondo es tan retorcido como brutal el caso en cuestión.
Rosa, quien tiene una hija de su anterior pareja, con quien había tenido sus más y sus menos por supuestas infidelidades y numerosas mentiras, vive con su hija en una casa, en el trabajo mantiene relaciones con dos compañeros del cuerpo, ambos altamente conflictivos, violentos, dados al consumo de sustancias tóxicas y al abuso de poder.
La situación y las mentiras desembocan en un trágico final, el asesinado es quemado, supuestamente una vez ya muerto, en el maletero de su coche, vehículo que es encontrado en el Pantà de Foix.
La realidad de la ficción
Los culpables que ya los conocemos todos, al menos en España, pues estuvo como noticia destacada en los noticieros de toda España desde sus inicios hasta los juicios que los condenaron; son Rosa Peral y Albert López.
En la actualidad los que perpetraron el cruel asesinato del agente Pedro Rodríguez se encuentran en prisión, su pena es de 25 años para Rosa y de 20 años para Albert.
Se estima que sin reducción de pena ambos deberían salir de la cárcel cuando cumplan 61 y 59 años respectivamente.
Qué tal está El Cuerpo en Llamas
Entretenida, morbosa así que desde luego es una serie que no te puedes perder, más aún si te gustan las series de intriga, investigación y asesinatos.
Buscando parecidos, un vicio del que no se sale, te podría decir que de alguna forma aunque bastante vaga y lejana me ha recordado al suspense que mantiene la genial serie Dexter, y aunque la calidad de la misma no está a la altura, Dexter es insuperable, hay que reconocer que el reparto de actores y la historia en sí consigue mantenerte pegado a la pantalla, muy a pesar que por ser algo relativamente local y conocido ya sabes de antemano como acabará la serie, en prisión.
Reparto de El Cuerpo en Llamas
Úrsula Corberó, una realidad interpretativa mayúscula, tan sólo eclipsada en parte por su propia belleza, algo que sin quererlo se solapa con su buena actuación en esta serie, y por supuesto en otras anteriores pertenecientes a otras series como La Casa de Papel.
Aunque los más expertos podrían bajarle la nota por algún puntual exceso de histeria interpretativa en la serie, aunque eso es sin conocer realmente el personaje el cual, y con los hechos presentes, bien podría lastrar algún problema de personalidad o bipolaridad que diese cobijo a los mencionados excesos.
Quim Gutiérrez, el galán que, sin ser guapo, cae bien la persona tras el personaje y convierte en creíble cada una de sus actuaciones, y esta no iba a ser menos. Pero que a pesar de su cercanía en el papel de Alber, sin esa «t» final, y pronunciado con el golpe de voz en la A, infiere la dosis justa de maldad, sin exceso alguno, a su personaje.
José Manuel Poga, lo hace bien, aunque su dicción no es la mejor algo que no nos ha gustado porque a veces es difícil interpretar lo que dice.
Isak Férriz es actor tras Javi, el ex-marido de Rosa que firma un papel impoluto aunque con poca cuota de pantalla cuando por guión de los hechos reales quizá se merecía algo más.
La dirección de la serie corre a manos de Jorge Torregrossa y Laura Mañá, el guión es de Laura Sarmiento.